El precio promedio de la vivienda en Yucatán finalmente registró una disminución por primera vez desde 2019, pero la baja, de apenas 0.1 por ciento, ha sido considerada una burla para los yucatecos.
La mínima reducción de 2 mil 872 pesos, que llevó el costo promedio de las casas de 2 millones 29 mil 8 pesos a 2 millones 26 mil 136 pesos, ha generado frustración entre los habitantes del estado, quienes habían esperado un alivio más significativo ante el encarecimiento imparable de la vivienda.
A pesar de que el Índice de Precios de Vivienda, publicado trimestralmente por la Sociedad Hipotecaria Federal (SHF), muestra que Yucatán descendió del cuarto al quinto lugar en el ranking nacional de entidades con los precios de vivienda más altos, el cambio es mínimo y ha dejado un sabor amargo en los compradores potenciales. En contraste, Morelos experimentó un incremento de más del 4 por ciento en los precios de sus viviendas, lo que contribuyó a que Yucatán bajara en la lista.
Este descenso, que sigue siendo prácticamente imperceptible para la mayoría de los yucatecos, se da después de que el precio promedio de la vivienda en el estado se disparara un 13 por ciento en el primer trimestre del año, alcanzando un récord histórico de 2 millones 29 mil 8 pesos. Muchos esperaban que esta tendencia continuara, lo que hace que esta leve baja sea aún más decepcionante para quienes intentan acceder a una vivienda en la región.
El hecho de que esta disminución sea tan insignificante ha sido interpretado como una falta de respuesta a la crisis de asequibilidad que enfrenta el estado, donde el encarecimiento de la vivienda ha superado las expectativas y ha dejado a muchos fuera del mercado inmobiliario. Los yucatecos siguen esperando medidas más contundentes que realmente alivien el costo de vida en la entidad.