El reciente asesinato del ingeniero en Ticul se ha vinculado a un grupo de extorsionadores originarios de Quintana Roo. Se alega que este grupo exigía el pago de un “derecho de piso” al ingeniero para permitir la construcción del Nuevo Hospital General del Instituto Mexicano del Seguro Social en la “Perla del Sur”.

Los individuos detenidos y procesados por su supuesta participación en este homicidio son José K.M., Rogelio A.A., Dennys Alan A.B., Roberto Heraldo R.A., Suleymi Cristal M.T., y Heydi Noemí C.M. Una mujer identificada como Martha “N” fue liberada al no encontrarse evidencia suficiente para su procesamiento.

Los siete individuos fueron llevados ante el juez de control de Tekax, Manuel Soberanis Ramírez, para enfrentar cargos por homicidio calificado y extorsión cometidos en pandilla, según lo denunciado por la esposa del ingeniero contratista asesinado, Edy “N”, de 37 años.

Una vez que escucharon las acusaciones en su contra, los seis mencionados fueron formalmente detenidos y se les impuso la medida cautelar de prisión preventiva oficiosa durante la duración del proceso. El juez Soberanis Ramírez determinó que la audiencia de vinculación se llevará a cabo el 5 de noviembre para definir su situación legal.

El ingeniero en Ticul era blanco de extorsión desde el 21 de octubre, cuando comenzó a recibir llamadas y mensajes de extorsión. Los extorsionadores le exigían dinero para permitir que continuara su trabajo como ingeniero en la construcción del Nuevo Hospital General de la Zona 70 del Instituto Mexicano del Seguro Social, ubicado en la calle 23 número 325 por 54 de la colonia Tinajas en Ticul. Las amenazas de daño en caso de no cumplir con sus demandas se llevaron a cabo de manera conjunta y previamente planificada por los ahora procesados.

El 28 de octubre, alrededor de las 7:45 a. m., la víctima esperaba transporte para dirigirse a su trabajo en la calle 23 entre 38 y 40 de la colonia San Enrique en Ticul, junto con Martha “N”. En ese momento, José presuntamente privó de la vida al ingeniero utilizando un arma de fuego, resultando en un traumatismo torácico abierto secundario a una herida de proyectil de arma de fuego como la causa de su fallecimiento.

Rogelio, Dennys, Roberto, Suleymi y Heydi aparentemente prestaron intencionalmente ayuda al sicario para cometer el delito y trataron de evadirse. Sin embargo, se les localizó mediante cámaras de vigilancia y el testimonio de varias personas.