La primaria estatal Manuel Alcalá Martín se enfrenta a una grave situación que está poniendo en peligro la seguridad de los estudiantes. Un muro electrificado en las instalaciones, agravado por las lluvias recientes, ha causado descargas eléctricas a varios niños, generando preocupación entre padres y docentes.
A pesar de los esfuerzos de la directora y del personal docente por solucionar el problema, la respuesta de la supervisora escolar, Lorena Beatriz Méndez Canto, ha sido cuestionada. Según denuncian padres de familia y maestros, la funcionaria ha minimizado la gravedad de la situación y ha reaccionado con agresiones verbales y desdén ante las peticiones de atención.
La comunidad escolar ha señalado que la supervisora, presuntamente protegida por el secretario de Educación, Liborio Vidal, ha mostrado una total falta de acción ante los riesgos que este peligro eléctrico representa para los menores.
La situación ha generado una creciente tensión, y padres de familia exigen que las autoridades educativas actúen de inmediato para garantizar la seguridad de los estudiantes y que se tomen medidas contra la supervisora por su negligencia. La comunidad no está dispuesta a permitir que la indiferencia ponga en riesgo la vida de los niños.