En un movimiento inesperado que ha generado sorpresa en el sector salud, trascendió que el Dr. Jorge Marín presentó su renuncia como director del Centro de Salud Urbano de Mérida, dejando un legado difícil de superar. Su gestión, marcada por una serie de logros innovadores y una visión centrada en la calidad y calidez de la atención, ha transformado radicalmente este importante centro de atención primaria en Yucatán.
El Dr. Marín se ganó el aprecio de usuarios y trabajadores por su capacidad para resolver problemas y su enfoque humano hacia la salud pública. Entre sus iniciativas más destacadas se encuentra ser pionero en otorgar vacaciones a trabajadores de contrato mediante comisiones, una medida que benefició la salud mental de su equipo, muchos de los cuales llevaban años sin descanso.
Fue también quien acabó con el sistema de fichas limitadas, erradicando prácticas corruptas y garantizando atención universal. Bajo su liderazgo, se instauraron servicios médicos y administrativos nocturnos, y se creó la Unidad de Atención al Usuario, una herramienta clave para ofrecer un servicio con calidad y calidez.
El Dr. Marín fue creador del modelo de atención en “salida”, llevando servicios de prevención a colonias, comisarías, asociaciones y escuelas, innovando al no esperar a que los pacientes llegaran enfermos al consultorio. Este enfoque proactivo contribuyó a mejorar la salud comunitaria y acercar los servicios a quienes más los necesitaban.
Además, promovió políticas internas para estimular a los trabajadores, fomentando el deporte, otorgando vacaciones extraordinarias y nunca levantando actas administrativas, gracias a su filosofía de que todos merecen una segunda oportunidad.
Un liderazgo clave durante la pandemia
Su liderazgo también fue crucial durante la pandemia, al implementar guardias laborales que salvaron vidas al reducir riesgos de contagio. En el ámbito de infraestructura y gestión, logró climatizar áreas críticas, desalojó paraderos inseguros, certificó al centro como espacio libre de humo y tabaco, y creó el primer módulo de salud mental (MOSAME) del estado, un esfuerzo integral para combatir el suicidio.
Un legado de excelencia en salud pública
Bajo su dirección, el Centro de Salud Urbano de Mérida ganó en dos ocasiones el premio PACAL, posicionándose entre los mejores laboratorios de México. También implementó un sistema de gestión de calidad horizontal que eliminó barreras entre usuarios y prestadores de servicio.
Con su renuncia, el Dr. Marín deja un vacío difícil de llenar. Su compromiso con los usuarios y trabajadores del Centro de Salud Urbano de Mérida será recordado como un modelo ejemplar de gestión en el primer nivel de atención. Su visión y entrega han dejado huellas imborrables en el sistema de salud pública de Yucatán.