Caracas.— El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, anunció este lunes que por segundo año consecutivo adelantará la temporada navideña en el país, decretando su inicio oficial a partir del 1 de octubre. Según el mandatario, la medida busca “impulsar la economía” y garantizar “el derecho a la alegría” de los venezolanos.
“Vamos a aplicar la fórmula de otros años, que nos ha ido muy bien para la economía, para la cultura, para la alegría, para la felicidad, y vamos a decretar (que) desde el 1 de octubre arranca la Navidad en Venezuela otra vez”, declaró en su programa semanal de radio y televisión.
Maduro subrayó que “nada ni nadie en este mundo nos va a quitar el derecho a la felicidad, a la vida”, en un discurso en el que buscó reforzar la narrativa de resistencia frente a lo que su gobierno considera agresiones externas.
El anuncio se da en un contexto de alta tensión con Estados Unidos. La administración bolivariana calificó como “una agresión” la orden del entonces presidente estadounidense, Donald Trump, de desplegar buques de guerra frente a las costas venezolanas bajo el argumento de combatir a los cárteles latinoamericanos del narcotráfico.
En respuesta, Caracas incrementó la presencia militar en sus litorales y movilizó a miles de integrantes de las denominadas milicias bolivarianas, compuestas por civiles voluntarios armados, para reforzar la defensa del país junto con las fuerzas armadas.
Trump también elevó a 50 millones de dólares la recompensa por la captura de Maduro, a quien Washington acusa de ser uno de los principales narcotraficantes del mundo. El presidente venezolano, por su parte, insiste en que se trata de una “falsa narrativa” diseñada para forzar su salida del poder.
Con el adelanto de las festividades, el gobierno busca enviar un mensaje de optimismo en medio de un panorama político y económico marcado por la confrontación internacional, la inflación y las carencias cotidianas que enfrentan millones de venezolanos.