WhatsApp ha corregido una vulnerabilidad de día cero que permitía la instalación del software espía Graphite, desarrollado por la empresa Paragon. La falla fue detectada por investigadores de seguridad del Citizen Lab de la Universidad de Toronto, quienes alertaron sobre la grave amenaza para los usuarios.
Una puerta abierta para el espionaje
El exploit permitía a atacantes instalar Graphite sin el conocimiento del usuario, dándoles acceso a datos personales, conversaciones y posiblemente activando el micrófono y la cámara del dispositivo de forma remota. Este tipo de spyware ha sido utilizado en ataques dirigidos contra periodistas, activistas y funcionarios gubernamentales.
WhatsApp responde, pero persisten las preocupaciones
Meta, propietaria de WhatsApp, lanzó un parche de seguridad para cerrar la brecha, recomendando a los usuarios actualizar la aplicación de inmediato. Sin embargo, el incidente vuelve a encender alarmas sobre la vulnerabilidad de plataformas de mensajería ante ataques sofisticados y el uso de spyware por parte de gobiernos y entidades privadas.
El Citizen Lab ha instado a las empresas tecnológicas a reforzar sus medidas de seguridad y a los usuarios a mantenerse alerta ante posibles amenazas de vigilancia digital.
Si usas WhatsApp, asegúrate de tener la última actualización instalada.
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