En Telchac, la reciente colocación de una botarga que pretende representar al dios maya Chacc ha desatado una ola de críticas entre los yucatecos, quienes consideran que esta representación es un ataque directo a la autenticidad y dignidad de la cultura maya. Uno de los más fervientes críticos es Ermilo López Balam, reconocido promotor y defensor de la cultura maya, quien expresó su indignación a través de redes sociales.
López Balam compartió un dibujo del dios Yuum Cháak, realizado por el arqueólogo Guillermo Kantún Rivera, tomado de una vasija prehispánica. Según López Balam, esta representación clásica es un ejemplo de la riqueza y autenticidad de la iconografía maya, en contraste con la botarga instalada en Telchac, a la cual calificó de “vil invento” y “adefesio”.
“El respeto a la cultura maya no debe sacrificarse en aras de la modernidad o la atracción turística. La botarga que pusieron en Telchac es una muestra de la ignorancia y falta de sensibilidad hacia nuestras raíces. Quienes pagaron por ese adefesio les vieron la cara de pndjos”, declaró López Balam en su publicación.
El defensor de la cultura maya no se limitó a criticar la botarga, sino que también sugirió alternativas más respetuosas y fieles a la tradición maya, como la construcción de una estela monumental al estilo prehispánico que represente de manera auténtica al Yuumtsil Maaya. Según él, la cultura maya ya es lo suficientemente atractiva por sí misma y no necesita ser “estilizada” o alterada con elementos que distorsionan su esencia.
Este incidente ha generado un debate más amplio sobre cómo se debe representar y preservar el patrimonio cultural en Yucatán, especialmente en un contexto donde el turismo y la modernización a menudo se imponen sobre la autenticidad histórica. La voz de López Balam, respaldada por otros defensores de la cultura maya, resuena como un llamado a respetar y valorar la riqueza cultural de la región sin caer en lo que ellos consideran una banalización de sus símbolos más sagrados.