Mérida, Yucatán.– La ganadería en Yucatán atraviesa una grave crisis sanitaria por la expansión del gusano barrenador (Cochliomyia hominivorax), que cada día provoca cientos de casos en el hato y pérdidas millonarias para los productores.
El problema ha alcanzado tal magnitud que ya se han confirmado dos contagios en personas, lo que enciende las alertas de salud pública en toda la región.
Una plaga que devasta al hato
Ganaderos denuncian que la situación se ha salido de control:
“Cada becerro que nace, mientras intenta cerrar la herida del ombligo, ya está infectado por el gusano barrenador”, relatan productores del oriente del estado.
La plaga ataca sin tregua y amenaza con colapsar la economía rural de Yucatán, que depende en gran parte de la producción de carne y leche.
Autoridades sin reacción
Pese al panorama, los ganaderos aseguran que ni autoridades locales ni federales han implementado un plan de emergencia efectivo, dejando al sector desprotegido.
“Todos los días son cientos de casos nuevos y nadie hace nada”, lamentan los productores, quienes advierten que el gusano barrenador puede poner en riesgo el estatus sanitario del estado y de la Península.
El riesgo humano
El gusano barrenador no solo afecta al ganado: al invadir tejidos vivos, también representa un peligro para la salud humana. La confirmación de dos casos en personas refuerza la urgencia de acciones inmediatas para contener el brote.
Robo de aretes: otro golpe al sector
A esta emergencia sanitaria se suma otro problema: la detección en Yucatán de aretes de ganado robados en Puebla, pertenecientes al Sistema Nacional de Identificación Individual de Ganado (Siniiga).
Los identificadores, robados en junio en un asalto en carretera, ya circulan en Chiapas y en la Península, lo que abre la puerta a fraudes y a la movilización irregular de reses. Expertos advierten que esto podría facilitar el traslado de animales infectados, complicando aún más la crisis.
Un llamado urgente
La combinación de la plaga del gusano barrenador y la inseguridad en el manejo pecuario coloca a la ganadería yucateca en un escenario crítico que exige medidas inmediatas:
- 🐄 Control sanitario efectivo contra el gusano barrenador.
- 🩺 Protección a la salud pública, ante los primeros casos en humanos.
- 💰 Seguridad en la cadena pecuaria, para frenar fraudes y riesgos de contagio.
Productores insisten en que la situación no solo afecta al campo, sino a toda la población que depende de la producción ganadera como parte fundamental de la alimentación y la economía regional.