La tensión estalló en la primaria “Pedro R. Pinzón Sánchez”, ubicada en el fraccionamiento Zazil-Ha, al sur de Mérida, luego de que un grupo de padres de familia acusara públicamente a la directora del plantel, Ana Cristina Sosa Bazán, de presuntamente quedarse con el dinero de las cuotas escolares y los materiales de limpieza que habían aportado al inicio del ciclo.
“¿Dónde están los detergentes, los cloros, los aromatizantes, las bolsas para basura, los trapos y demás, que trajimos?”, reclamó con voz enérgica una madre de familia durante la manifestación realizada a las puertas de la escuela, en la calle 52 por 125A.
La inconformidad, que comenzó como un reclamo colectivo, pronto se tornó en un enfrentamiento verbal con gritos e insultos, luego de que se confirmara que la directora no solo no respondió a las quejas, sino que recientemente fue ascendida a supervisora de zona. Los padres denunciaron que, además de las cuotas en efectivo, Sosa Bazán habría retirado los artículos de limpieza que los tutores entregaron para garantizar la higiene de los espacios escolares.
“Con razón no hay materiales para higiene y limpieza”, señalaron molestos, recordando que los propios alumnos se han quejado de la suciedad en los baños y la falta de insumos básicos para mantener el plantel en condiciones dignas.
Ante la tensión creciente y la posibilidad de que el conflicto pasara a mayores, alguien solicitó la intervención de la policía. Minutos después, agentes de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) arribaron al lugar para calmar los ánimos y evitar que el enfrentamiento escalara.
Durante la protesta, también salió a relucir el nombre de un trabajador de intendencia identificado como Jacobo, a quien los padres acusaron de ser cómplice de la directora en la presunta sustracción de los materiales de limpieza.
Los tutores exigieron una respuesta inmediata de las autoridades educativas, así como la devolución del dinero y de los insumos, pues advirtieron que sin ellos la higiene del plantel se ve comprometida y los niños están expuestos a condiciones insalubres.
“Queremos claridad y que se respete el esfuerzo de todos los padres que aportamos”, subrayaron, dejando en claro que no piensan detener sus reclamos hasta que haya una solución.